Los ciudadanos de Esparta debían casarse antes de los 30 años. En caso que no lo hicieran perdían algunos derechos civiles como el voto, incluso castigarlos con el destierro.
Permiso para cometer adulterio
Siguiendo en Esparta, las mujeres de esa época podían engañar a su marido, aunque con una condición muy clara: solo con hombres más fuertes y altos que su cónyuge.Idea nada desdeñable!!!
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